Consejos y técnicas para una conducción eficiente

La conducción eficiente es un modo de conducir cuya finalidad es la de lograr menores consumos. Esta forma de conducir requiere de una serie de conocimientos y técnicas que ahora os enseñaremos. Conducir de manera eficiente reduce la fatiga al volante, aumenta el confort de marcha y disminuye los riesgos en la carretera. Además de bajar el consumo de combustible y reducir la contaminación. Esto ayudará a poder conducir coches de renting de nuestra web con menores consumos y beneficiarte de restricciones de circulación en ciudades como Madrid.

Ventajas de la conducción eficiente

La conducción eficiente tiene una serie de ventajas. El ahorro de combustible y el consecuente ahorro económico es una de las primeras y más importantes ventajas. En este tipo de conducción el ahorro de carburante se produce sobre todo al arrancar el coche o en las situaciones de frenada.

Otra ventaja es que disminuye la tensión al volante y mejora el confort. Evitando así frenazos y acelerones bruscos provocados por mayores situaciones de nervios y estrés. Mejorar estas técnicas supone un incremento de la seguridad al volante. Tanto para los conductores como para el resto de los usuarios de la vía.

Consejos para una conducción eficiente

Ahora te contamos cuáles son algunos de los consejos y técnicas ideales para una mejor conducción eficiente.

Estado de los neumáticos

Es indispensable que los neumáticos tengan la presión indicada por el fabricante. Ir con las ruedas con poca presión hace que el contacto con el asfalto aumente y el gasto del combustible sea mayor. Para un viaje largo, es importante también revisar la presión de las ruedas, e hincharlas ligeramente por encima de lo indicado sobre todo si vamos a ir con mucha carga de equipaje.

Utilización de la primera marcha

La primera marcha es solo para iniciar. Es decir, que una vez recorramos los primeros metros, lo aconsejable es engranar la segunda. De esta manera evitaremos forzar el motor y no subiremos muchas revoluciones de manera innecesaria.

Marchas largas

Depende qué coche tengamos y qué combustible utilice, es aconsejable movernos en un rango de revoluciones u otro. Siempre los diésel tienen menos margen y es aconsejable cambiar de marcha en torno a las 2.000 rpm, mientras que los de gasolina a las 2.500 rpm. Conduciendo en marchas largas muchas veces logramos reducir los consumos. Pero previamente es importante acelerar de manera progresiva y mantener una velocidad constante.

Utiliza bien los frenos y el freno motor

Una de las partes más importantes a la hora de conseguir una conducción eficiente es el uso del freno motor. Debemos ser inteligentes y anticiparnos a las situaciones de la carretera. Si nos acercamos a un tramo donde hay coches parados, tráfico o un semáforo, lo ideal es soltar el acelerador y que el freno motor del coche o la frenada regenerativa, hagan el resto. De esta manera, recargamos la batería (en caso de tenerla), reducimos los consumos notablemente y no desgastamos los frenos.

Control de crucero

El control de crucero es otro de los elementos clave en una conducción eficiente. Este sistema de ayuda a la conducción mantiene o adapta la velocidad de manera automática, contribuyendo a una velocidad constante y a un menor consumo de combustible. Se utiliza mucho para viajes largos.

Apagar el motor

Otra de las prácticas habituales en muchos conductores es al de dejar el coche encendido al ralentí. Si la parada que vamos a realizar es corta, no pasa nada por dejar el coche encendido. De hecho, es mejor porque no estaremos parando y arrancando. En cambio si la parada se prolonga por encima de los cinco minutos, lo recomendable es parar el motor. Al ralentí el coche es cuando más consume y además emite grandes cantidades de CO2.

¿Qué elementos aumentan el consumo del coche?

Circular a gran velocidad afecta gravemente al consumo del coche. También a altas velocidades, hay ciertos elementos del vehículo que afectan negativamente al consumo del coche.

• Aire acondicionado: Es uno de los elementos que más incide en el consumo. Lo aconsejable es mantener la temperatura del habitáculo en torno a los 21 grados.
• Carga y equipaje: Hay que procurar evitar las cargas innecesarias de equipaje. Colocar mal la carga puede provocar una descompensación en el eje y ofrecer mayor resistencia, por lo que el coche consumirá más.
• Ventanillas: Conducir con las ventanillas bajadas provoca también mucha resistencia y rozamiento lo que supone un mayor consumo del coche.
• Mantenimiento del vehículo: Es importante tener al día el mantenimiento de nuestro coche. Buenos niveles de aceite, filtros en buen estado, neumáticos nuevos. Todos esos elementos en mal estado pueden influir en el consumo.
• Antigüedad del vehículo: Los coches antiguos consumen bastante más que los coches nuevos por el simple hecho de que la tecnología es mejor y los sistemas de rendimiento de los coches son sobresalientes hoy en día. La antigüedad tiene que ver con el valor venal del coche.

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